Los ocho patrulleros de la Armada de Venezuela construidos en España por la empresa Navantia, podrían ser dotados en un futuro próximo de misiles antibuque y armas antisubmarinas, de fabricación rusa, según ha trascendido.
Como se sabe, los cuatro patrulleros oceánicos tipo "Avante 2400" y los cuatro patrulleros de vigilancia litoral tipo "Avante 1400" fueron encargados en noviembre de 2005, fecha que coincidió con la imposición, por parte de Estados Unidos, de un veto a la venta y transferencia de armas y tecnología militar, norteamericanas, a Venezuela.
A esa medida de Washington se sumaron otros países proveedores habituales de sistemas de armas y equipos militares a Venezuela. En consecuencia, a la Armada venezolana se le dificultó, de manera significativa, encontrar en los mercados tradicionales el armamento requerido para equipar a los buques que estaban siendo construidos en astilleros españoles.
Finalmente, cada buque fue dotado de dos cañones: un Oto Melara de 76 mm, italiano, y un Oeirlikon Millenium de 35 mm, suizo. Asimismo, le fueron incorporados sistemas de control de tiro franceses.
En julio pasado, el comandante general de la Armada, almirante Diego Molero Bellavia, anunció la aprobación del proyecto para dotar a los ocho patrulleros de sistemas de "defensa antisubmarina" y "misilístico superficie-superficie". Si bien no se precisaron los modelos, se comentó que eran chinos y rusos, pero a la vez se planteó la dificultad de integrarlos en buques de diseño occidental.
Ahora bien, la interrogante ha sido despejada con la firma de un convenio, entre la corporación estatal rusa Rosoboronoexport y Navantia para establecer las condiciones de la integración de sistemas de armas desarrollados en Rusia en los buques de la serie "Avante" diseñados por la empresa española.
Fuente: notitarde; Carlo Hernandez
Como se sabe, los cuatro patrulleros oceánicos tipo "Avante 2400" y los cuatro patrulleros de vigilancia litoral tipo "Avante 1400" fueron encargados en noviembre de 2005, fecha que coincidió con la imposición, por parte de Estados Unidos, de un veto a la venta y transferencia de armas y tecnología militar, norteamericanas, a Venezuela.
A esa medida de Washington se sumaron otros países proveedores habituales de sistemas de armas y equipos militares a Venezuela. En consecuencia, a la Armada venezolana se le dificultó, de manera significativa, encontrar en los mercados tradicionales el armamento requerido para equipar a los buques que estaban siendo construidos en astilleros españoles.
Finalmente, cada buque fue dotado de dos cañones: un Oto Melara de 76 mm, italiano, y un Oeirlikon Millenium de 35 mm, suizo. Asimismo, le fueron incorporados sistemas de control de tiro franceses.
En julio pasado, el comandante general de la Armada, almirante Diego Molero Bellavia, anunció la aprobación del proyecto para dotar a los ocho patrulleros de sistemas de "defensa antisubmarina" y "misilístico superficie-superficie". Si bien no se precisaron los modelos, se comentó que eran chinos y rusos, pero a la vez se planteó la dificultad de integrarlos en buques de diseño occidental.
Ahora bien, la interrogante ha sido despejada con la firma de un convenio, entre la corporación estatal rusa Rosoboronoexport y Navantia para establecer las condiciones de la integración de sistemas de armas desarrollados en Rusia en los buques de la serie "Avante" diseñados por la empresa española.
Fuente: notitarde; Carlo Hernandez